DESESPERANZA

...a nada le encuentro aliciente todo me cansa, ¿ para que seguir viviendo esta vida en la que todo me produce amargura y desesperación? 

¿Qué sentido tiene continuar así?

Yo tiro la toalla, no quiero seguir....

Estas palabras son un veneno, que harán que nos sintamos cada vez peor, porque hemos elegido confiar en nuestras propias fuerzas y no tener en cuenta que las batallas se vencen poniéndolo todo en manos de Dios, sin caer en la autocompasión y la lástima, que son las peores herramientas de las que nos podemos valer, para salir de las circunstancias que padecemos y no conseguimos salir a flote por nosotros mismos.

Si estamos deprimidos y sin fuerza para continuar luchando, lo mejor es hacer una parada y plantearse

 ¿ quiero seguir sintiéndome mal en mi interior? o ¿ prefiero hacer el esfuerzo de combatir la amargura y desesperanza que hacen que todo lo vea negro, no encontrando la luz sin hallar consuelo alguno, que hace que cada vez me encuentre peor sin querer seguir viviendo.?

Lo más fácil es quitarse de enmedio, pero esa actitud no pertenece a la persona, es un veneno que se va filtrando poco a poco y nos aparta de él amor que habita en el interior de el corazon "Dios con nosotros" y es la fuente de la alegría, que nos dará la paz en medio de las peores circunstancias de la vida.

Porque no se trata de sucumbir ante las adversidades, sino de vencer la batalla del mal con las armas de la Fe;

la palabra de Dios, el santo Rosario, la Eucaristia, la adoración al santisimo sacramento, la confesión.

Estas son las cinco piedras que venceran al goliat y nos harán sonreír en medio de la gran batalla,  porque si Dios esta con nosotros 

¿quién contra nosotros?

Nadie.