ESCLAVOS DE NUESTRAS PASIONES

Si el hombre no muere a las pasiones será esclavo de ellas.

La pasión a satisfacerse a sí mismo/a, sin poner como prioridad, el morir a mi mismo/a para dar vida al ser que tengo en mi interior:

"Dios con nosotros";

un amor que se consume hasta dar la vida por su criatura, que no se mira a sí mismo/a sino que se entrega para que podamos tener vida en plenitud.

Son muchos los que por seguir las atracciones del mundo, de la carne, del demonio, dejan de lado al único Dios que les devolverá la alegría y la esperanza a sus corazones.

La vida empieza a tener sentido, cuando empiezo a caminar en la verdad,

que habita en nuestros corazones, la misericordia echa carne:

"Dios con nosotros"