NÓ VIVIRE POR LO QUE SIENTO NO VIVIRE POR LO QUE VEO.
En la vida pasamos por circunstancias que hacen que nos sintamos tristes y deprimidos, si lo miramos por el lado del pensamiento negativo nos descorazaremos. Tenemos que poner la mirada en un lugar más alto, en dejarnos hacer por las manos de Dios. El conoce por el sufrimiento que estamos pasando y como todo padre acude a consolar a su hijo. Cuántas lágrimas derramamos muchas veces, porque no sentimos que la persona que se ha comprometido de corazón con una promesa, no la ha tomado en serio, sólo es para continuar alargando los tiempos, porque la decisión carecía del valor más importante del ser humano: "la honestidad". Si no somos honestos con nosotros mismos, tampoco lo podremos ser con los demás. Decirse la verdad a sí mismo, es el Pilar, para que una relación de pareja, esté cimentada en suelo sólido, resistente a cualquier tempestad que pueda surgir. Si no me digo la verdad a mi mismo, me estoy haciendo daño a mi mismo y a las personas que con mis palabras les hago la