MARIA MIRAME
Mejor madre que María no hay ninguna, ella dio el "Sí" de corazón, haciendo con ello posible, "el plan de salvación", que Dios tenía con sus criaturas.
Gracias "Mama", por tú "Sí" que hace que queramos imitarte, para asi poder gozar del mayor amor;
"la misericordia de Dios echa carne", la ternura del amor de Dios que se encarna en el corazón de los hombres, cuando siguen el mandamiento del amor:
"amaras a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo".
La mejor sorpresa que podemos anhelar, es que nos amen con todo el corazón y con toda el alma, para que florezca en nuestro ser, la flor cuya esencia Dios creó con tanto amor.
Su esencia, el perfume de la santidad;
el amor, que es paciente, es servicial, no toma en cuenta el mal, es comprensivo, lo aguanta todo, espera siempre, todo lo cree, disculpa siempre, no es arrogante, no hace alarde....es eterno
Amar hasta el limite sin esperar nada a cambio, este es el verdadero amor, El que Jesús nos dono, "su vida", más ya no se podia dar.
El dio su "Si de corazón", se nego a sí mismo, cargando con la cruz, que todos los dias, fue llevando hasta consumirse en el último aliento.
Gracias por aceptarme como soy, dando la vida por mi.
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS JESÚS.
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